Bodega Las Virtudes de Villena
15 Jun 2016 Bodega Las Virtudes de Villena
“Patojo” símbolo de toda una revolución.
Bodega Las Virtudes de Villena cuenta con un amplio surtido de vinos, en
línea con la diversidad de su producción. Y ha realizado en los últimos años
un esfuerzo increíble por adaptar sus instalaciones a las nuevas técnicas de
elaboración para crear vinos que conviven con elaboraciones más . Así
encontramos el estilo “vintage” de vinos como “Gachamiguero”, “Arcabucero” junto con la moderna línea de varietales “Vinalopó”.
Y es que la bodega ha emprendido una renovación de su imagen y de sus vinos, que la ha hecho especialmente llamativa. A sus renovados etiquetados, se le suma la apertura de sus instalaciones para visitas y catas comentadas que suponen un gran aliciente para la ciudad, por su cercanía con ese maravilloso casco histórico.
Pero estos cambios no son para nada superficiales. La bodega ha emprendido un proyecto sumamente original y revolucionario para sus socios y para todo el sector al Patrimonio Monastrell”. Con él quieren pagar más a los viticultores que cumplan unas determinadas normas de producción en los monastrelles más antiguos. Esto como entrada, porque lo que quieren es diferenciar estas producciones tan valiosas en su zona y destinarlas a vinos de paraje, diferenciados y con mayor expresividad.
El primero de los vinos que han comenzado a elaborar procedente de la última vendimia es “Patojo 2015 tinto”. Así es el nombre del paraje donde han localizado viñas viejas de monastrell de producción ecológica y han separado su producción del resto.
Patojo es un vino que responde a un trabajo concienzudo por parte de los equipos de viticultura enología y por supuesto por el buen hacer y la tradición agrícola de los socios de la bodega. Es el resultado de la defensa de su uva más preciada, la autóctona monastrell. Es además un vino respetuoso con el medio ambiente, que cuenta con certificación ecológica. En definitiva, es un monastrell de alta expresión, bien definido, equilibrado y con una estructura compleja.
De color rojo rubí con ribetes morados. Ofrece una amable entrada en boca, es fresco y fácil de beber.
Un proyecto sin duda de enorme valor cooperativo, humano, medioambiental, y un vino goloso y apetecible que seguro dará mucho que hablar en sus próximas añadas y nuevos desarrollos.